Rusia.- El presidente Vladimir Putin, admitió que lo acontecido, el 31 de octubre, con un Airbus de la compañía rusa Metrojet en el Sinaí egipcio, en el que murieron 224 personas, fue causado por un atentado terrorista.
«Durante el vuelo, se activó un artefacto explosivo artesanal de una potencia equivalente a un kilo de TNT», indicó Putin a través de un comunicado publicado por el Kremlin. «Podemos decir que se trata de un atentado», afirmó.
Pocos minutos antes, el jefe de los servicios secretos rusos (FSB), Alexandre Bortnikov, había revelado que la catástrofe se debía a un atentado. Al mismo tiempo que informó que las pruebas mostraron que los explosivos fueron fabricados fuera de Rusia.
El Estado Islámico dijo que el ataque era una represalia por la campaña rusa de ataques aéreos contra el grupo y otras organizaciones en Siria, donde Moscú quiere preservar el régimen del presidente Bashar Assad.