Neuquén.- El intendente Horacio Quiroga aseguró que el gobierno provincial “se ha convertido en un especialista en refinanciar deuda y no para hacer obras sino para sostener el gasto corriente” y remarcó que “no debe ser fácil estar en el lugar del gobernador que arrastra sobre sus espaldas el peor déficit en la historia de la provincia que fue el año pasado de 4800 millones de pesos”.
“Debe ser un momento de mucha angustia. Y hay que destacar el esfuerzo del gobernador para financiar el déficit que tienen las cuentas provinciales”, dijo Quiroga.
Además planteó sus dudas con respecto a la emisión de 2100 millones de pesos en letras que anunció el gobierno provincial. “Están hablando de vencimientos a 4 años con lo cual habría que analizar si no es en realidad un bono porque las letras se emiten para pagar deuda dentro de un mismo ejercicio”, dijo el intendente.
En declaraciones a los medios de prensa, Quiroga también se refirió a las gestiones que llevó adelante el gobernador Omar Gutiérrez ante el gobierno nacional para que no se modifique el valor del barril criollo establecido en 67,5 dólares.
“Estoy de acuerdo en que vaya a pedir que se debe sostener el precio del barril pero esto lo tiene que hacer ahora porque en su momento, cuando valía 147 dólares y Nación nos pagaba 42 dólares, el gobierno provincial hizo mutis por el foro, el gobernador se quedó piola. Ahora van a pedir que les paguen algo que no vale y antes algo que valía mucho, nos esquilmaban y nadie decía nada”, sostuvo el intendente.
En ese sentido agregó que “no resulta sencillo partir del análisis de un gobierno provincial que ha tenido sus vaivenes no sé si ideológicos pero sí de posicionamientos, han pasado de un kirchnerismo recalcitrante a un macrismo vocacional”.
“Yo quiero ver un gobernador oficialista porque de esta manera también se construye la Nación y el Presidente necesita de todos los gobernadores. En su momento también para hacer el desastre que el kirchnerismo hizo de la Argentina necesitaron de todos los gobernadores y uno de los gobernadores que se prestó a ese desastre fue Jorge Sapag. Nos depredaron los yacimientos, dejaron que nos metan la mano en el bolsillo y no dijeron nada”.