Las provincias de Mendoza y Córdoba implementaron nuevas normativas de tránsito que prohíben explícitamente tomar mate mientras se conduce. La medida busca reducir distracciones al volante y ya contempla sanciones económicas significativas: en Mendoza, la infracción puede costar hasta $420.000, mientras que en Córdoba asciende a $24.000.
En Mendoza, la Dirección de Seguridad Vial catalogó esta acción como una infracción gravísima, que además se suma al sistema de puntaje que puede derivar en la suspensión de la licencia. La normativa está vigente tanto en rutas como en zonas urbanas.
Córdoba también se sumó a la iniciativa. La Agencia Córdoba Seguridad Vial explicó que tomar mate requiere soltar una o ambas manos del volante, algo expresamente prohibido por la Ley Nacional de Tránsito.
Desde los organismos de seguridad vial explican que cebar o tomar mate implica una combinación de distracción visual y manual: una mano fuera del volante, la mirada puesta en el termo o el mate, y el riesgo de derramar líquido caliente, lo que puede generar maniobras intempestivas.
“Es una práctica culturalmente aceptada, pero muy peligrosa. El mate no es compatible con la conducción segura”, sostienen desde la Agencia Nacional de Seguridad Vial, que impulsa campañas para eliminar este tipo de distracciones al manejar.
Por ahora, la medida rige únicamente en Mendoza y Córdoba, pero no se descarta que otras jurisdicciones adopten disposiciones similares. En regiones como la Patagonia, donde el turismo y el tránsito en rutas son intensos, suele haber adhesión a normativas que refuercen la seguridad vial.
En Neuquén, por ejemplo, aún no existe una prohibición específica sobre el mate, aunque la distracción al volante ya está considerada como falta grave.