Un reclamo «pasional como Rosario Central» se volvió viral

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Se trata de un usuario que ha tenido repetidos problemas con el aerosol y decidió enviarle una carta a Molinos Río de la Plata S.A. para expresar su frustración. La queja se volvió viral por ser representativa del malestar de tantos ciudadanos que se sienten indefensos cuando los productos no funcionan.

El usuario además de enviar la carta a la empresa multinacional, publicó el curioso reclamo en Twitter donde se volvió viral. Ahí explica que el aerosol Fritolim que compró, solo lo pudo usar dos veces y ya no le funcionó más.

«El mismo, aún estando lleno, no escupe su producto, sólo lo usé dos veces. El contenido está atrapado dentro del envase como el genio en una lámpara, como un preso en Guantánamo», escribió.

En la carta de dos hojas enviada a la empresa, el cliente remarca que no es la primera vez que le sucede y que es un tema que ya le pasó a mucha gente. «No es la primera vez que escucho de esto. Varios usuarios conocidos míos del barrio me han comentado tener problemas similares», dice ocurrente.

«Nuevamente les escribo lo que muestra que a pesar de que ustedes ya me han fallado, yo, sigo poniendo la otra mejilla ¿Soy masoquista? ¿Soy de esos tan buenos que parecen tarados? ¿Soy una carmelita descalza envuelta en una conexión tóxica con sus productos diabólicos?», se pregunta.

A modo de explicar su desilusión, describe. «Yo no pagué lo mucho que pagué porque disfruto de ver el diseño de su producto. No necesitaba un inútil pisapapeles con forma de Fritolim. Yo quería coicnar. Como Elba la cocinera ganadora del MasterChef original. Milanesas en lo posible, batatitas y papitas si me pongo mimoso. Quizás huevos fritos si mi salud me lo permite. pero no pude».

El cliente que envió la queja asume que lo que está haciendo parece exagerado, pero admite que es una persona pasional. «Mi corazón bombea más de lo normal y para lo que para otros sería una pequeña molestia, para mí es ggante, como el Gigante de Arrollito (sic) y la pasión por Rosario Central. Gigantezca», dice en refrencia al club rosarino aunque lo se visualiza en su cuenta de Twitter es que es hincha de Quilmes.

Sobre el final de la extensa carta, el hombre dice que no quiere otra cosa que poder solucionar el problema y comer la milanesa que deseaba en el momento en que quiso utilizar el Fritolim. «No les pido que combatan la adicción al paco, les pido que fabriquen un Fritolim que se pueda usar. Solo quiero comer una milanesa en paz», concluye.