Venezuela.- El «Millonario» se presentó en Venezuela para su debut ante Trujillanos, un equipo que ostentaba tres victorias consecutivas por el torneo de su país, en el que marcha segundo a un punto de Zamora.
El conjunto local intentó sorprender al campeón vigente con la individualidad de Gerardo Mendoza. El volante apostó por su velocidad y exigió con remates de media distancia a Marcelo Barovero, quien mostró su seguridad habitual.
En cambio, las respuestas del conjunto argentino se basaron en el balón detenido. La buena pegada de Leonardo Pisculichi fue la herramienta más empleada. A pesar de las complicaciones que llevaban los disparos del ex Argentinos, Leandro Díaz se las ingenió para desactivar las acciones de riesgo.
En el complemento los argentinos continuaron aplicando la misma mecánica para llegar al gol. Cada tiro libre ejecutado por el volante de Rafael Castillo expuso las limitaciones de Leandro Díaz. Así, a los 9 minutos de la segunda etapa, Pisculichi la colgó del ángulo para festejar el 1 a 0. Una diferencia que pudo ampliarse de inmediato, si el travesaño no se hubiese interpuesto en otro intento de la figura de la noche.
Como si se tratara de una fórmula científica, el hombre con pasado en el fútbol de Asia siguió haciendo de las suyas. Otro remate al pecho del arquero le permitió a Lucho González capitalizar el rebote y concretar el 2 a 0.
La muestra de carácter de José Páez fue la única muestra de supervivencia de los locales. Con mucha vergüenza, el defensor se desentendió de sus compañeros y buscó sorprender a Barovero con un violento tiro con destino de red, pero Trapito desvió al córner. De todos modos, Iván Alonso terminó con las escasas esperanzas venezolanas cuando marcó los dos últimos tantos y convirtió el triunfo en goleada.
Con los tres puntos adquiridos, los de la banda comenzaron con el pie derecho en el Grupo 1, dado que el abultado triunfo le permite encabezar la zona.
Fuente: Infobae