Neuquén.- Marcelo Zúñiga, delegado del Ministerio de Trabajo de la Nación, renunció hoy por el «rumbo marcado de la política laboral y económica que se caracteriza por despidos masivos en lo público y en lo privado, persecución a los trabajadores y criminalización de la protesta social».
Así lo declaró Zúñiga, y explicó que había presentado su primera renuncia en diciembre del año pasado y que no fue aceptada.
«Considero que el rumbo de la política pública caracterizada por despidos masivos, persecución ideológica, criminalización de la protesta social y rebajas salariales contradicen los objetivos por los que asumí la función» aclaró el ex funcionario en su cuenta de Facebook.
Además, el ex delegado afirmó que «no está dispuesto a convalidar» ni «aceptar mansamente» las postura del actual gobierno de condicionar las paritarias para que el reclamo de aumento salarial no sea más del 20 o 25%.
Zúñiga dijo que «prácticamente hay un vaciamiento y una vuelta a prácticas que poco tienen que ver con la defensa de los trabajadores» en el Ministerio de Trabajo. Relató que recibió instrucciones para limitar su actuación en los conflictos laborales y que hubo un quite de presupuesto para los fondos operativos de fiscalización.