Neuquén.- En conferencia de prensa se anunció, ayer al mediodía, la nueva edición del Plan Nacional de Entrega Voluntaria de Armas de Fuego, que en la provincia se llevará a cabo en Neuquén capital, Plaza Huincul y Centenario. De la presentación participaron el ministro de Coordinación de Gabinete, Seguridad y Trabajo, Gabriel Gastaminza, el director del plan nacional, Martín Angerosa, y el referente del Registro Nacional de Armas (Renar) en Neuquén, Jorge Crespín.
En su exposición, Gastaminza informó que durante las dos primeras semanas de noviembre se realizará la campaña intensiva para la entrega voluntaria de armas de fuego y municiones en tres localidades: del 2 al 6 de noviembre los ciudadanos podrán ir al puesto móvil que estará en el estadio Ruca Che de Neuquén capital, mientras que del 9 al 13 de noviembre los puestos estarán en Plaza Huincul y en Centenario.
Remarcó que durante la misma la delegación del Renar en Neuquén también estará habilitada para realizar la entrega voluntaria de armas de fuego y municiones. Recordó que la entrega es anónima y voluntaria, y tiene un incentivo económico que va desde los 500 pesos hasta los dos mil pesos, dependiendo el armamento entregado.
A su turno, Martín Angerosa expresó que Neuquén no escapa a la realidad que tiene el país, “donde hay hechos de violencia armada, que todos los días se ven reflejados en las estadísticas oficiales, salud pública y también en los medios de comunicación”.
También, sostuvo que retirar las armas de circulación en las calles y los hogares “es una política pública que busca prevenir la violencia, las muertes y los heridos, y que también se busca concientizar a la población para que no adquieran nuevas armas de fuego”.
A su vez, informó que desde la aplicación del plan se destruyeron 171 mil armas de fuego. “Sumadas a las que estaban en depósitos judiciales y policiales, se llegó a las 300 mil armas destruidas y fuera de circulación en ocho años”, señaló.
Finalmente, destacó que una política integral de armas de fuego consiste en controlar el mercado legal y perseguir al mercado ilegal. “Lo más importante es la prevención de la violencia”, concluyó.