Buenos Aires.- Hoy se cumplen 22 años del asesinato del reportero gráfico José Luis Cabezas, ocurrido en Pinamar.
«Ni los servicios de inteligencia tienen una foto mía», dijo en una entrevista el empresario menemista Alfredo Yabrán. Poco después, Cabezas fue el primero que logró fotografiarlo y lo pagó con su vida.
Pese a los intentos de la familia, la Justicia nunca fue determinante y liberó al último detenido por el crimen del fotógrafo.
Hoy, 22 años después, la figura de Cabezas toma más fuerza entre los trabajadores de la comunicación. Miles de actos se desarrollan a lo largo y ancho del país para recordarlo.
