«Mi pobre angelito» reaparece en corto

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Esta vez Kevin McCallister es un conductor de Úber, la empresa de servicio de transporte de lujo, y en su afán de desahogar el trauma que le dejó de niño aquella situación vivida con los dos ladrones, utiliza la violencia para exorcizar sus demonios.

Tras recoger a un pasajero e intercambiar los roles de conductor y usuario, McCallister revive su dolor y empieza con una catarsis de aquellos dramáticos momentos que vivió en su hogar.

Tras la secuencia un hombre increpa el vehículo y los amenaza con un arma. Luego la escena finaliza con el sometimiento del ladrón y una escena cargada de simbolismo en la que McCallister danza ensangrentado al ritmo que se escuchan los gritos del hombre en el fondo.

Este cortometraje hace parte de :Dryvrs una serie en la que se contarán historias de conductores. No obstante, Culkin solo aparece en este episodio.