Venus Williams no le dio lugar a la sorpresa, se impuso a María Irigoyen con parciales de 6-1 y 6-4 y, de esta manera, Estados Unidos liquidó la serie por el Grupo Mundial II de la Fed Cup ante Argentina por 3-1.
Quebró de entrada Irigoyen (197º del mundo) y ese fue el único momento que pudo disfrutar en el primer parcial, debido a que a partir de ahí Williams desplegó todo su talento y brindó una cátedra de tenis en un colmado Pilará.
La mayor de las hermanas, undécima en el ranking, puso en cancha su habitual potencia, abrió espacios tanto con el drive como con el revés, y también se animó a tirar algún lujo. El set fue con un categórico 6-1.
Venus volvió a quedarse con el servicio de la argentina en el arranque del segundo parcial y así sumó el séptimo game al hilo. Llegaron a ocho, hasta que Irigoyen logró cortar la racha y, luego, quebró para emparejar las acciones en dos juegos por lado.
Williams quebró en el quinto y lo confirmó con su saque. Irigoyen ganó un par de puntos a pura garra, que hizo levantar al público. Venus sacó para partido y, después de alguna duda tras un 40-0, terminó con la esperanza argentina.
Antes, Paula Ormaechea (121º del mundo), habia derrotado en el arranque de la jornada a Coco Vandeweghe (32º) por 6-4 y 6-4.
En el tercer punto de la serie se esperaba la presencia de las mejores raquetas de cada uno de los países y la gente que volvió a colmar el Pilará fue con la expectativa de ver nuevamente a Serena Williams, pero la estadounidense adujo un malestar y no se presentó.
Ya lejos de ser casi una utopía la victoria, Ormaechea salió a la cancha sabiendo que podía dejar la eliminatoria todavía con vida, más allá de que su rival tampoco era una improvisada (hizo tercera ronda en el reciente Abierto de Australia), y lo consiguió con un muy buen rendimiento.
Las dos mantuvieron el saque hasta el 2-2 y en el quinto quebró la de Sunchales; le duró poco la ventaja ya que le quebraron al siguiente, pero volvió a quedarse con el saque de su rival en el séptimo y no dejó escapar el parcial.
Ormaechea prolongó su muy buen momento en el arranque del segundo set y dejó el resultado 3-0 con dos quiebres consecutivos. Vandeweghe logró recuperar uno en el cuarto juego. Luchado fue cada uno de los puntos al final. Se sentía el nerviosismo en Pilará. Hasta que la derecha de Vandeweghe se estrelló en la red y desató la locura argentina.
Con esta derrota, el equipo nacional de Fed Cup tendrá que jugar por no descender a la Zona Americana, mientras que el triunfo le permitirá a Estados Unidos disputar un repechaje para volver a jugar en el Grupo Mundial I.