Buenos Aires.- El domingo 31 de marzo se cumplieron diez años de la muerte de Raúl Alfonsín. El dirigente de la Unión Cívica Radical es una figura inigualable dentro del partido y su acción como presidente electo tras la última dictadura militar quedará en la historia del país.
Era 1984 y el país dejaba atrás una etapa oscura, triste, dolorosa, corrupta y sumamente violenta. Alfonsín se convierte en presidente electo y muchas cosas pasaron desde ese día. La crisis económica y social debilitaría a la UCR, pero la figura del ex mandatario quedaría para el resto de los días de la Argentina democrática.
Ricardo Alfonsín, hijo del ex representante, recordó a su padre. Para Ricardo, el principal legado es «asegurar la democracia durante su gestión, haber terminado definitivamente con las dictaduras. Pocos creían que esa sería la última transición y, sin embargo, se logró».
Mauricio Macri también habló sobrela figura del mandatario fallecido. «El mejor homenaje que podemos hacerle es demostrar que somos capaces de construir una Argentina unida, como la que él soñó, con instituciones sólidas y políticas públicas que mejoren la calidad de vida de nuestra gente. Una Argentina donde la justicia, la honestidad y el respeto por los derechos humanos sean pilares sobre los que podamos apoyarnos con firmeza».
