La aplicación se llama Wire. Es gratis, y está disponible para Android, iOS y OS X (estará en PC en el próximo trimestre, según reporta The Guardian). Y es un jugador más en un segmento que tiene múltiples participantes y unos pocos líderes. Pero esto no frenó a sus creadores, ni a uno de los fundadores de Skype, Janus Friis, de apoyar su desarrollo.
Wire permite chatear, sincronizar conversaciones entre dispositivos, hacer llamadas (pero, por ahora, sin video), participar en grupos de mensajes, compartir fotos, videos de YouTube o audios de SoundCloud que se reproducen dentro de la aplicación. Todo el intercambio de datos está encriptado.
La aplicación hace un fuerte hincapié en la parte visual, con un diseño muy cuidado para la aplicación, y que permite organizar los contactos según la frecuencia con la que se intercambian mensajes, y que varía según la hora o el día. Se puede llamar la atención de un contacto con un «ping» y silenciar conversaciones con mucho intercambio de mensajes, al estilo de Whatsapp.
Por ahora es gratis, y los desarrolladores prometen no incluir publicidad en ella, aunque sí están explorando formas de generar dinero para mantener su desarrollo.
El desafío, por supuesto, está en lograr que la aplicación logre adeptos, porque por ahora no parece ofrecer ventajas por sobre sus competidores más establecidos
