La que podría ser la primera vacuna para el VIH que se lance al mercado empezará a ensayarse en 3800 voluntarios de varios países, incluida la Argentina. La expectativa es que la nueva vacuna brinde protección durante varios años, “aunque también hay que ver si se necesitan dosis de refuerzos y con qué periodicidad”, explica Omar Sued, director de investigaciones clínicas de la Fundación Huésped.
Con la aprobación de la Anmat, en junio va a arrancar el ensayo clínico de fase tres en la Fundación Huésped y en otro centro del país. El estudio se realizará en 200 centros de Estados Unidos, Europa, México, Brasil, Perú y la Argentina, con el financiamiento de Janssen y organizaciones como los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de los Estados Unidos y la Fundación Bill & Melinda Gates.
Argentina va a contribuir con 600 participantes sanos, en principio hombres que tienen sexo con hombres de 18 a 30 años, quienes recibirán al azar un esquema de cuatro dosis de la vacuna o inyecciones inertes (placebo) en las semanas 0, 12, 24 y 48. Un estudio similar, pero en mujeres, ya está en marcha en el sur de África.
