«Yo sé que Nisman preparó un borrador pidiendo mi arresto, yo sé que lo que él denunció no es cierto y me defenderé en los tribunales», le dijo el canciller de Argentina, Héctor Timerman, a la BBC.
«Solo confío en la ley», insitió el ministro, quien figura, junto a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, en el texto de la denuncia que había preparado el fiscal Alberto Nisman. que apareció muerto el 18 de enero con un tiro en la cabeza en su departamento un día antes de presentarse ante el Congreso a dar cuenta de esas acusaciones.
En ellas, Nisman argumentaba que la presidenta y Timerman, además de otras personas que menciona el documento, habían intentado encubrir a los ciudadanos iraníes investigados por su supuesta participación en el atentado contra la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en la que murieron 85 personas en 1994; el mayor atentado contra civiles judíos desde la Segunda Guerra Mundial.
Tras la muerte de Nisman, un nuevo fiscal, Gerardo Pollicita, tomó a su cargo la denuncia contra Fernández y Timerman. El canciller dijo que está listo para defenderse ante los tribunales: «Estoy listo, puedo ir mañana, a la hora que me llamen».
El reciente pedido de imputación a la Presidenta, al canciller y a otras figuras del kirchnerismo por parte de Pollicita avivó aún más la tensión entre el Poder Ejecutivo, el Judicial y un pueblo ya de por sí polarizado.
«No tengo nada que esconder. Ni la Presidenta ni yo hicimos nada malo, al contrario, hicimos más que cualquier otro gobierno para saber quién cometió el terrible crimen contra la AMIA», dijo el canciller.
«Estoy orgulloso de lo que hice, porque fue en el nombre de las víctimas, mi compromiso es sólo con ellas. No hago política con las víctimas», agregó.
La Nación
