Neuquén.- La ciudad de Neuquén se encuentra enfrentando un desafío creciente en cuanto a la circulación vehicular. Según datos de la municipalidad de Neuquén, aproximadamente 175 mil vehículos circulan diariamente por las calles de la ciudad generando un tránsito intenso.
El aumento en la cantidad de vehículos en la ciudad se debe en parte al crecimiento demográfico y económico de la región. Sin embargo, la infraestructura vial de la ciudad no ha crecido al mismo ritmo, lo que ha generado congestión y saturación en las principales arterias.
Los conductores que circulan por la ciudad denuncian la falta de fluidez en el tránsito, especialmente durante las horas pico. «Es un caos», es la frase predominante.
Las autoridades locales han anunciado planes para mejorar la infraestructura vial de la ciudad. Sin embargo, estos proyectos no son fáciles de concretar en un país con la obra pública paralizada.
El secretario de Modernización, Javier Labrín, habló al respecto en el aire de La Red Neuquén. «En puntos como la Ruta 7 el tránsito es cada vez mayor», ejemplificó.
Además, el funcionario mencionó que en el oeste de la ciudad «no hay aún monitoreo del tránsito, pero en puntos como el Puente Carretero nos confirman los datos de alta circulación en hora pico».
Frente a las dificultades obvias de este tráfico, Labrín destacó que «las fotomultas están colaborando en el respeto de las normas básicas de tránsito, en un principio hubo muchas multas pero cada vez son menos y estamos en un promedio aceptable».
«Las mejoras al transporte público también aportó para que el tránsito no colapsara. Este flujo vehicular seguirá creciendo y es necesario tratarlo», aseveró.
Diego Zuñiga, secretario de Fiscalización de la municipalidad de Cipolletti, fue consultado en Mañanas en Red sobre la problemática de circular por las ciudades hermanas.
«El crecimiento de la actividad en Vaca Muerta se refleja en el número de camiones y grandes rodados por nuestros accesos», indicó el funcionario.
También comentó que «las responsabilidades laborales y educativas generan un movimiento constante y diario entre ambas ciudades, que nos encontramos unidas por puentes lo que suma a estas complicaciones».