Neuquén.- La Municipalidad invitó a vecinos y turistas a realizar la excursión a la unión de los cursos de agua del Limay y Neuquén que da origen al río Negro y a conocer a través de sus senderos un escenario de exhuberante vegetación poco habitual para nuestra ciudad. El paseo se realiza todos los domingos a las 11 y el punto de encuentro es un área acondicionada como estacionamiento que se encuentra en la calle Obrero Argentino al fondo.
Roberto Martini, subsecretario de Turismo, recomendó no hacer el paseo de forma particular por cuestiones de seguridad e indicó que durante las visitas guiadas efectivos policiales acompañan a los excursionistas y cuidan los vehículos aparcados en el lugar.
El “Paseo de la Confluencia” inicia con un recorrido pedestre por toda la vera del Limay hasta su encuentro con el cauce del Neuquén pero la caminata prosigue 40 metros más por la ribera para llegar a la confluencia, donde se puede contemplar la unión de las aguas cristalinas del Limay con las turbias del Neuquén.
A contramano del paisaje desértico que con sus bardas caracteriza a nuestra ciudad, el sendero se encuentra tapizado de sauces y álamos, rosas mosquetas, zarzamoras y otras plantas de frutas finas que crecen de manera silvestre y en abundancia.
A los senderistas se les recomienda asistir con ropa y calzado cómodo, gorro, repelente, protector solar y agua para recorrer un circuito de 3.000 metros lineales de ida y vuelta que cuenta con puestos de avistaje de flora y de aves.
Para llegar al lugar de encuentro donde esperan los guías turísticos, los interesados deben recorrer Obrero Argentino hasta el río y de allí retomar unos 700 metros hacia la izquierda hasta encontrar un espacio acondicionado para el estacionamiento de vehículos.
Las excursiones se implementan desde febrero y para ello el municipio transformó el camino en sendero pedestre con bancos, cartelería, puestos de avistaje de aves y cestos de basura.