Río Negro.- El 1 de agosto se dará la sentencia en la causa emblemática por la desaparición y asesinato de Daniel Solano. Siete policías están acusados de haber sacado con violencia a Daniel de un boliche y de habérselo llevado en un móvil policial la madrugada del 5 de noviembre de 2011. Desde entonces está desaparecido.
El juicio se desarrolló a lo largo de 5 meses, con dobles audiencias semanales y un caudal testimonial muy rico, producto de la investigación de los abogados Sergio Heredia y Leandro Aparicio por más de 6 años. Fueron contundentes los testigos que vieron cómo sacaron a Daniel Solano del boliche, lo llevaron hasta la esquina y lo subieron a un móvil Eco Sport de la policía: Solano fue sacado con violencia y subido a golpes en el móvil policial.
Todos los policías fueron señalados por distintos testigos como presentes esa noche en el boliche Macuba, pero en su defensa cuatro de los efectivos presentaron sus coartadas negando haber estado esa noche en el boliche. Los tres policías que sí estaban en funciones la madrugada del 5 de noviembre, acudieron al boliche en el móvil policial y declararon que los llamaron por una falsa alarma: niegan haber detenido a Solano, ´todo estaba tranquilo y regresamos a la comisaría´.
A lo largo de 30 audiencias quedó demostrado para la querella el entramado delictivo entre la policía, las empresas, el poder judicial y secretarías de trabajo, que involucran otros delitos como estafa laboral, narcotráfico, trata de personas con fines de explotación laboral y sexual.
En dicha estafa estaría involucrada la transnacional EXPOFRUT, de la que era directivo Fernando Oris de Roa, recientemente nombrado embajador de los Estados Unidos. Esta empresa contrataba a la tercerizadora Agrocosecha que empleó y estafó a Daniel Solano y a sus 400 compañeros; ese es, para la querella, el móvil del asesinato y desaparición del joven.