Argentina.- El empleo público sigue ocupando un rol central en el mercado laboral argentino, aunque presenta marcadas diferencias según la provincia. La mayor parte de los trabajadores públicos se desempeña en los niveles provincial y municipal, y tanto la cantidad de personal como los niveles salariales varían ampliamente de una región a otra. Un informe elaborado por la Fundación Ecosur, revela cómo es el empleo estatal en el país.
En las provincias patagónicas y en varios distritos del norte, la participación del Estado como empleador es considerablemente más alta, mientras que en las jurisdicciones con economías más desarrolladas —como Buenos Aires, Córdoba o Santa Fe— prevalece la actividad privada, con una menor proporción de empleados públicos.

Tierra del Fuego encabeza el ranking con 130 empleados cada 1.000 habitantes, seguida por La Rioja (114), Catamarca (106), Neuquén (105) y Santa Cruz (104).
En el otro extremo se ubican Córdoba (33), Buenos Aires (37), Santa Fe (42) y Mendoza (44), donde el empleo estatal tiene un peso significativamente menor.
De esta forma, las provincias con mayor presencia del Estado como empleador triplican o cuadruplican la cantidad de trabajadores públicos por habitante respecto de las jurisdicciones más orientadas al sector privado.
A partir del gasto total y del número de empleados, Ecosur calculó el costo laboral promedio de cada administración provincial. Aunque los valores incluyen aportes patronales y otros conceptos que impiden equipararlos directamente con los salarios, ofrecen una estimación válida del ingreso medio en el empleo estatal. De ese análisis surge que Neuquén y Santa Cruz son las provincias con mayor costo laboral, con un gasto mensual promedio de $3,1 millones y $2,8 millones por empleado, respectivamente. Detrás se ubican la Ciudad de Buenos Aires ($2,3 millones), Chubut ($2,2 millones) y Tierra del Fuego ($2,2 millones).