Buenos Aires.- La Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) le respondió al canciller Héctor Timerman, luego de su renuncia a las filas de la institución judía alegando el supuesto «obstruccionismo» de la investigación del atentado contra la sede de la entidad judía.
«En todas mis conversaciones con los dirigentes de ambas instituciones me ha quedado claro que su intención es mantener la denuncia contra los sospechosos y al mismo tiempo boicotear toda posibilidad de iniciar el juicio comenzando con obstaculizar los instrumentos de cooperación judicial acordados con Irán», acusó ayer el canciller en un mensaje que también tenía a la DAIA como destinatario.
Desde la AMIA, los directivos Mario Sobol y Leonardo Jmelnitzky acusaron recibo de la carta de renuncia del funcionario. «Rechazamos de plano los términos utilizados en la misiva por considerar falsas, infundadas y calumniosas las expresiones contra la AMIA y sus dirigentes. Es intolerable e inadmisible la más mínima insinuación de que la entidad y sus autoridades puedan haber actuado con ánimo de obstaculizar el curso de la investigación por el atentado terrorista del cual fuimos víctimas», sostuvieron a través de un comunicado.
Y atribuyeron la renuncia y las acusaciones de Timerman a la manifestación de parte de la AMIA, en reiteradas ocasiones durante los últimos dos años, de su desacuerdo con el memorándum de la Argentina con Irán que impulsó el Gobierno, para descubrir responsabilidades en el atentado.
En su carta, la mutual lamentó que «el hecho de haber manifestado una posición contraria al Memorándum de entendimiento firmado con la República de Irán», la haya convertido en destinataria «de acusaciones tan graves como injuriosas». Y añadió: «Esas reacciones no hacen más que demostrar una profunda falta de respeto ante el disenso y la imposibilidad de aceptar posturas diferentes».