Neuquén.- Esta mañana los trabajadores del Control de Ingreso Provincial de Productos Alimenticios (CIPPA) realizaron una volanteada en el puente que une Centenario con Cinco Saltos, en reclamo por mejores condiciones laborales.
En diálogo con LA RED 93.7 y LA RED NEUQUINA DE RADIOS, el delegado de ATE, Alejandro Álvarez manifestó que “el principal inconveniente son las extensas horas de trabajo”.
La polémica se abrió cuando, consultado por los periodistas, Álvarez aseguró que “la jornada diaria en el CIPPA es de 8 horas”, misma cantidad que un empleado promedio. Además, aseguró que se les paga “un porcentaje extra por trabajo nocturno”.
“Trabajar de noche nos genera mucho estrés y no nos permite tener una vida normal como el resto de los empleados”, aseveró el delegado de ATE.
Por último, sostuvo que si no tienen respuesta, mantendrán las medidas de fuerza.