Neuquén.- Cuando una mujer víctima de violencia de género se va de su casa, además de sus hijos se lleva todos los problemas de vivir sin un hogar y muchas veces sin un salario propio.
En un contexto donde la violencia machista no es abordada por el gobierno nacional, los Estados más chicos aparecen para dar una respuesta. En este sentido, la Subsecretaría de Mujeres de la Municipalidad sigue trabajando arduamente para brindar contención.
Alejandra Oehrens, a cargo de la Subsecretaría, habló en La Red Neuquén sobre la problemática en la ciudad de Neuquén.
«Lamentablemente debo decir que somos el único espacio especializado que se mantiene en pie en Argentina. En el resto del país se cerraron áreas, programas y todo lo relacionado a la violencia contra la mujer», señaló la funcionaria.
Sin embargo, pese a contar con el apoyo de la intendencia de Mariano Gaido las necesidades para cubrir son muchas.
Ante tantas cosas para hacer, la funcionaria remarcó la necesidad de contar con un refugio acorde a la problemática. «La provincia y la ciudad no tuvieron ni tienen la cantidad de refugios necesarios. De hecho, Neuquén capital no cuenta con un refugio», lamentó.
Explicó que «el espacio que se usa en la actualidad es para mujeres en situación de calle y con problemas de consumo, no es un buen lugar para mujeres violentadas y sus hijos».
A su vez, la funcionaria destacó la colaboración de «iglesias de la ciudad que nos prestan sus instalaciones para albergar a las víctimas».
«Es importante que los Estados se pongan al frente de la problemática. Es nuestra responsabilidad que se cumplan los derechos de esas mujeres y niños», aseveró.
En esa línea, celebró «la postura del intendente Gaido de mantener este espacio de ayuda a mujeres, es una decisión política que destacamos».
«Colaboramos con la mujer que pide dejar el hogar violento y le brindamos ayuda jurídica para que el hombre se haga responsable de las cuotas alimentarias. Mientras la Justicia define esas cuestiones, ofrecemos herramientas laborales para que la víctima pueda salir de la opresión», agregó.
Por último, la funcionaria aseguró que la víctima «solo necesita una posibilidad de salir del círculo violento y cuando el Estado ofrece esa mano cambian sus vidas para siempre».