Neuquén.- Por primera vez en la Clínica y Maternidad de Rincón de los Sauces, que pertenece al Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, se resolvió con éxito una intervención obstétrica de altísimo riesgo que hasta ahora obligaba a derivar a las pacientes a Neuquén capital.
El 28 de agosto, Jazmín Escudero Vilches, de 22 años y cursando su primer embarazo, ingresó a la guardia con síntomas alarmantes: “dolor de cabeza, dolor de estómago, náuseas y vómito”, describió el director médico de la institución, doctor David Vaz. En pocos minutos su presión arterial se disparó de 160/100 a 180/120. “Hicimos los análisis de sangre y orina y confirmamos la preeclampsia. Era un cuadro grave que obligaba a actuar con rapidez”, explicó.
“De 180/120 la pasé a 120/70. La ingresamos a quirófano normotensa y ya con menos síntomas. Empezaron a mejorar sus dolores y decidí hacer la cesárea de urgencia”, añadió.
La cirugía fue decisiva: Martina nació en perfecto estado, con 3,180 kilos, sin signos de sufrimiento fetal. Su madre pasó al área de terapia intermedia, donde continuó con tratamiento y transfusiones para mejorar sus glóbulos rojos. “Al otro día empezó a estar mejor, se la estabilizó con sangre, cardiología hizo interconsultas, participó nutrición y toda la parte de enfermería estuvo a la altura. Al cuarto día se fue con su bebé y su marido por la puerta grande”, resumió el médico.
La clínica, que ya incorporó ateneos médicos para entrenar a su personal en emergencias, avanza en un plan de expansión con nuevos consultorios y especialidades. “Queremos que la gente se derive lo menos posible, ahorrarles el viaje y demostrar que en Rincón se pueden hacer las cosas bien”, concluyó Vaz.