Neuquén.- La Cooperativa CALF puso en marcha un plan de detección y suspensión de conexiones irregulares en distintos puntos de la ciudad. Esta medida busca garantizar el uso equitativo y seguro del servicio eléctrico, proteger la red de distribución y cuidar los recursos de los asociados.
El plan contempla:
• Relevamientos sistemáticos en zonas identificadas con alto nivel de irregularidad.
• Verificación técnica de los medidores y acometidas.
• Suspensión inmediata del suministro en casos de fraude o conexión ilegal.
• Canal de atención para regularizar situaciones de manera voluntaria.
Nicolás Auterio, Subgerente de Cobranzas, Conexiones y Renovación Tecnológica de Calf, dio detalles de la iniciativa en contacto con Radio con Vos Neuquén.
«Es importante dejar en claro que el procedimiento no es punitivo ni busca sancionar, al contrario. Buscamos prevención y dar un buen servicio. Quienes deseen regularizar sus conexiones pueden hacerlo», aseveró.
Para descartar algunos mitos, el representante señaló que «existe la creencia de que la gente colgada de la luz es de bajos recursos y estos procedimientos nos muestran lo contrario».
«Detectamos en su mayoría a diversos comercios y restaurantes ubicados en el centro de la ciudad robando energía. Si una heladería con seis cámaras de refrigeración paga lo mismo que una casa es porque algo raro esta pasando y allí es donde apuntamos», indicó.
Agregó que «el primer pensamiento suele ser un barrio o asentamiento que esta colgado o que puede parecer que lo esta, pero no pasa en la realidad de estos operativos».
Respecto al daño económico para la cooperativa, remarcó: «La energía robada no se factura, pero si se consume y alguien la paga. Ese alguien son los vecinos y comercios que con esfuerzo cumplen sus obligaciones de pagar sus facturas.
«Además de la pérdida de dinero y la energía que se debe generar, actuamos porque las conexiones irregulares son peligrosas. Provocan incendios, cortes y golpes de electricidad», cerró.