Neuquén.- Aníbal Caminiti, gerente de la Cámara Argentina de Productores de Cerezas Integrados (CAPCI), fue consultado acerca de los daños que generó la tormenta del último fin de semana en las chacras del Alto Valle.
«Unos 400 mil kilos de cereza no se cosecharan por los daños del granizo. Los daños por la lluvia todavía no se contabilizaron en su totalidad», manifestó en diálogo con La Red Neuquén.
En esa línea, Caminiti explicó que «más de 100 hectáreas de cerezas que no se pudieron trabajar por los daños de la tormenta, lo que genera que muchas personas no accedieron al trabajo temporario».
«En muchas tareas de empaques hay mujeres, lo mismo pasa con la cosecha de la fruta fina. Son mujeres de la región que directamente no trabajaron», lamentó.
A su vez, relató que «los hombres golondrinas suelen ser del norte del país y muchos arribaron a la región para hacer sus tareas temporarias y se ven seriamente afectados en sus ingresos económicos».
Caminiti también remarcó la necesidad «de que los gobiernos presten atención a una actividad noble que genera trabajo y sostenibilidad, es una economía importante para Río Negro y para Neuquén debería serlo».
«La fruticultura y afines ponen a disposición la misma cantidad de fuentes de trabajo que la actividad automotriz. Necesitamos una mirada integran de los gobierno Nacional y provinciales», cerró.


