Doha.- No fue un triunfo, pero lo festejó como si lo hubiese sido. Fue un empate, pero no fue sólo un empate. El seleccionado argentino masculino de handball hizo historia en su primer partido en el Mundial de Qatar 2015. Igualó en 24 con Dinamarca, uno de los tres mejores equipos del planeta. Un elenco súper profesional, repleto de figuras.
El elenco nacional comenzó el encuentro en ventaja (5-3), debido a su efectividad en ataque y a las imprecisiones ofensivas de los europeos, que sumaron cuatro pérdidas en los primeros 11 minutos. Pero fue sólo un momento del encuentro. Cuando calentaron motores, se tornaron intratables y completaron un parcial de 7-1 para colocarse 10-6 en 24 minutos.
El primer tiempo culminó con una ventaja de cinco para los daneses (13-8), una diferencia menor a la esperada por el nivel de ambos equipos. Allí comenzaron las especulaciones. ¿Rotar el equipo para pensar en los otros rivales? ¿Aguantar en el comienzo del complemento? ¿Jugarse para lograr un partido histórico? La respuesta fue clara.
El conjunto conducido por Eduardo Gallardo salió a dejar el alma ante un rival que sí eligió rotar a algunas de sus figuras. La diferencia se mantuvo en cinco en el inicio, pero la defensa argentina ajustó su concentración y el ataque, comandado por un Diego Simonet que recién anotó su primer gol en el segundo periodo, se transformó en un problema para el rival.
En 15 minutos, Argentina se colocó a dos (17-15) y comenzó a soñar con la hazaña. Sobre todo cuando a los 19, Diego metió un golazo y dejó al equipo a uno (19-18). Dinamarca sacó a la cancha otra vez a Mikkel Hansen, uno de los mejores del mundo, pero este careció de pimienta en sus arranques y el equipo albiceleste lo controló sin muchos problemas.
A poco del cierre, la ilusión pareció desvanecerse cuando Fede Pizarro, el goleador nacional con ocho tantos, perdió en el mano a mano con el arquero Niklas Landin para poner al equipo otra vez a uno (24-22). Pero Argentina no se cayó, apretó los dientes, defendió con alma y vida y hasta provocó errores insólitos para los daneses. Y tenía que ser con emoción.
A falta de 30 segundos, Argentina contó con la posesión para decretar la igualdad. Diego Simonet asumió la responsabilidad y puso el 24-24. Dinamarca tuvo la última con un tiro libre, pero el Negro García, quien redondeó una muy buena actuación, se quedó con el disparo de Mikkel Hansen. El abrazo de todos fue la imagen de la tarde en Qatar.
Los Gladiadores se quedaron con la figura del partido según la organización. Federico Pizarro fue el MVP. El 3 argentino convirtió 8 goles.
Lo que viene para la Argentina
domingo 18 de enero, 13.00, vs Polonia (TyC Sports)
martes 20 de enero, 13.00, vs. Arabia Saudita (TyC Sports)
jueves 22 de enero, 13.00, vs. Alemania (TyC Sports)
sábado 24 de enero, 13.00, vs. Rusia (TyC Sports)