Neuquén.- Durante un operativo de limpieza de canales entubados buzos contratados por la secretaría de Obras Públicas detectaron una conexión clandestina que arrojaba líquidos cloacales a un desagüe pluvial. La irregularidad se registró en la zona de Avenida Olascoaga y Beltrán y, según afirmó la subsecretaria de Servicios Ambientales, Paola Guerrero, se trata de “un caso grave más de contaminación producto de la mala gestión que el EPAS está haciendo con los efluentes en la ciudad”.
En ese sentido, subrayó que los canales y pluviales de la ciudad “desembocan inexorablemente en el Limay, por lo tanto nos encontramos con que el organismo provincial está arrojando cloacas al río”.
Producto de la conexión clandestina, el ente “fue inmediatamente intimado a subsanar el daño generado y será infraccionado por esta maniobra”, sostuvo.
Asimismo, hizo hincapié en que “no sólo tenemos los problemas de pérdidas a nivel superficial, sino que ahora también tenemos que desconfiar de las conexiones subterráneas que están haciendo producto de la saturación de las redes”.
“Son más de 100 los puntos que detectamos con pérdidas de agua o de efluentes cloacales gracias a un relevamiento que hicimos desde el área de Ambiente”, indicó, y añadió que “a una cuadra del lugar donde encontramos la conexión clandestina hay una perdida histórica, y estamos preocupados por que estamos hablando de la salud de los vecinos”.
“El problema es muy claro y tiene que ver con la falta de inversión, la ciudad creció, desde el organismo no se hicieron las obras necesarias y hoy estamos ante redes colapsadas con importantes riesgos ambientales”, expresó.
Justamente, este mes la subsecretaría comenzó una serie de charlas en el marco del programa Hagamos Ambiente en colegios que están cerca de estas pérdidas: “Estuvimos en la escuela Nuevo Mundo y los niños identifican claramente las tapas redondas de donde sale agua con feo olor, ya tienen esta situación naturalizada, y estamos hablando de la peligrosidad que conlleva convivir con efluentes cloacales sobre la superficie de la ciudad, y ahora detectamos estas conexiones que van a parar todas al río Limay”.
