En la conferencia del jueves donde presentó las conclusiones de las pericias hechas por la querella, Sandra Arroyo Salgado fue contundente: «Alberto Nisman no se suicidó, lo mataron. Fue un magnicidio de proporciones desconocidas». Además, afirmó que al cuerpo lo movieron, que hubo agonía y que el fiscal no estaba alcoholizado a la hora de morir.
Sin embargo, desde el equipo de peritos de la ex mujer de Nisman denunciaron que a través de las redes sociales se hizo circular una versión falsa de su estudio donde no se descarta la hipótesis del suicidio. El supuesto documento tiene las firmas de Osvaldo Raffo, Julio Ravioli y Daniel Salcedo, integrantes del grupo de trabajo de parte elegido por Arroyo Salgado.
Según reporta un diario nacional, en su edición impresa, fuentes cercanas a los forenses confirmaron que se trata de un informe «fraguado» y desde el entorno de los peritos, afirmaron «No es el verdadero. Sacaron el último párrafo y agregaron texto falso. Se trata de una operación para desacreditar el trabajo de la querella».
